ROSA M. TRISTÁN
«Hoy, el 14 de marzo de 2018, la raza humana ha sufrido una pérdida inconmensurable». Así comienza el mensaje que los amigos de Stephen Hawking en el Festival Starmus han lanzado hoy al conocer la noticia de su fallecimiento. Pareciera que a nadie debiera extrañar, dado que casi su vida entera ha sido un regalo, para él mismo y para el resto de la Humanidad, pero aún así deja un hueco que ha unido a astronautas, científicos y estrellas de la música en un adiós que refleja en si mismo la pasión por divulgar del astrofísico más famoso del mundo. Quien tuvo ocasión de estar con él saben que es alguien a quien no se olvidará nunca, por su obra y por su inmensa capacidad de supervivencia. Tampoco se olvidará que este país dejó marchar un festival único en el mundo que él defendió hasta el final.
En la misiva, que me llega desde el Festival Starmus, el guitarrista Brian May (Queen), Peter Gabriel, el fundador y director de Starmus, el astrómomo Garik Israelian, el cosmonauta ruso Alexei Leonov, la directora del SETI (institución para la búsqueda de vida inteligente extraterrestre en EEUU) Jill Tarter, el biólogo Richard Dawkins, el astrónomo Robert Williams, el Nobel de Medicina en 2009 Jack Szostak y el escritor y divulgador David J. Eicher, señalan que « no fue solo uno de los mejores científicos de todos los tiempos y una de las personas más influyentes del planeta, también un modelo e inspiración para muchos de nosotros».
«Stephen Hawking» -continúan – «cambió la forma en que percibimos nuestro Universo, nuestro tiempo y nosotros mismos y lo hizo con su talento único de comunicación y su suave sentido del humor Hawking. Aunque dejó un rico legado de ambos académicos y textos de popularización de la ciencia, extrañaremos su personalidad hilarante y su destacada habilidad para hacer de este mundo un lugar mejor».
Y es que Stephen Hawking fue miembro de la Junta Asesora de Starmus, y además un miembro activo porque encontró en este evento, creación de Garik Israelian (astrónomo en el Instituto de Astrofísica de Canarias), un espacio idóneo para su afán de atraer a los jóvenes hacia la ciencia, y hacerlo a través de su otra gran pasión: la música. Así que participó siempre que pudo, desde que en 2014 fuera su principal estrella (en el último Starmus 2017 en Noruega por Skype porque sus médicos no le dejaron viajar, pero quería estar) y también siempre estuvo dispuesto a enviar cartas de apoyo, a estar presente ante los medios para los grandes anuncios.
La Medalla Stephen Hawking, otorgada a los comunicadores científicos más exitosos, y creada por el Festival Starmus, mantendrá su legado y continuará inspirando a los amantes de la ciencia en su nombre.
«Para muchos de nosotros, Stephen Hawking era un símbolo de las inmensas capacidades del ser humano, de la mente que nunca se rinde y de la ciencia misma», señalan los firmantes, que recuerdan que Stephen nació el día del cumpleaños de Kepler, pero 300 años después, y ha fallecido el día del cumpleaños de Einstein, y como Einstein a la edad de 76 años. «Conservaremos este símbolo en nuestros corazones y seguiremos el camino que él anhelaba para nosotros. ¡Descansa en paz, profesor Hawking!».
El Starmus 2019 ya no contará con su presencia, pero no dudo de que será el gran homenaje a lo que le ha impulsado los últimos años: que la ciencia ayude a tener un mundo mejor.
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