Miles de científicos españoles, de los que aún no están haciendo las maletas, han visto como en el último Consejo de Ministros de mayo se esfumaba el compromiso que la secretaria de Estado de Investigación, Carmen Vela, había adquirido con ellos. A saber: que antes de que finalizara este mes el Gobierno daría vía libre a la convocatoria del Plan Nacional de Investigación, es decir, el dinero público del que disponen los investigadores para sacar adelante sus proyectos durante los tres siguientes años. «Es el desplante nacional’, me aseguran miembros de la Plataforma por la Investigación Digna, que también denuncian otro incumplimiento: no se están cubriendo las plazas de los jubilados en los centros públicos de investigación, que cada día parecen más desiertos.